Modesta opinión de un aprendiz de todo y maestro de nada...
Cuarta edición de la Peña Del Tren, que se puede decir de una carrera que se celebra en el sur de la provincia Leonesa donde por desgracia solo nos ubican para malas noticias.
Santiago Nistal tiene la culpa de todo, hombre inquieto donde los haya, esta edición quiere rizar el rizo, en mi modesta opinión lo va a conseguir.
Tuve el inmenso placer de acompañarle en unos de sus últimos entrenos para sacar los datos de la prueba en cuanto a kilómetros y desniveles.
Primeros kilómetros muy muy rápidos hasta salir del pueblo y cruzar la carretera, continua una subida constante sin grandes dificultades salvo la depilación de los valientes atletas que corran en pantalón corto, escobas muchas.
Pequeño descenso antes de encarar la subida que nos lleva a enlazar con el trazado de la anterior edición, eso será el km 7,5, de aquí en adelante se mantiene el trazado pero no las fuerzas con las que se llegaran a él.
En esta prueba hay tres reyes y una reina, los reyes son los cortafuegos que afrontaremos en orden descendente el primero para seguir volando bajo durante unos kilómetros, cundirán poco y llegaremos a la reina, la bruja de la Peña del Tren sobrevolando nuestras cabezas con su escoba esperando la fatiga en sus 4 o 5 ( que mas da) km de subida increschendo, saludamos de nuevo a los espectadores del km 7,5, pues sin moverse nos vuelven a ver, esta vez encarando otro cortafuegos antes de llegar al segundo rey, vertiginoso torta-fuegos (si no bajas atento) y de nuevo oleremos la carretera (sin tocarla) y veremos el pueblo como un espejismo, pues un giro de derechas nos lleva al último rey en forma de subida celestial, con 21km en las piernas será una bonita sensación, mientras lo pensamos ya estaremos entrando en el pueblo oliendo el arco de metas y el estofado de almuerzo.
En esta prueba hay tres reyes y una reina, los reyes son los cortafuegos que afrontaremos en orden descendente el primero para seguir volando bajo durante unos kilómetros, cundirán poco y llegaremos a la reina, la bruja de la Peña del Tren sobrevolando nuestras cabezas con su escoba esperando la fatiga en sus 4 o 5 ( que mas da) km de subida increschendo, saludamos de nuevo a los espectadores del km 7,5, pues sin moverse nos vuelven a ver, esta vez encarando otro cortafuegos antes de llegar al segundo rey, vertiginoso torta-fuegos (si no bajas atento) y de nuevo oleremos la carretera (sin tocarla) y veremos el pueblo como un espejismo, pues un giro de derechas nos lleva al último rey en forma de subida celestial, con 21km en las piernas será una bonita sensación, mientras lo pensamos ya estaremos entrando en el pueblo oliendo el arco de metas y el estofado de almuerzo.
Conclusiones claras, carrera rápida con mucha fatiga acumulada y las inclemencias del tiempo, se puede hacer muy dura en su parte final.
Texto: Pdro I. Cuevas Juan
Imagen: vertical km 20
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